MAREA ROJA: Rige la veda de recolección, comercialización y consumo de moluscos bivalvos

Los moluscos filtradores que se alimentan de microalgas concentran estas toxinas en sus tejidos, convirtiéndolos en alimentos altamente tóxicos. Estos pueden provocar enfermedades severas e incluso la muerte de quienes los consuman.
Pueden provocar intoxicaciones en los seres humanos y animales susceptibles a través del efecto de las toxinas producidas. Los casos más conocidos son:
Veneno Paralizante de los Mariscos (VPM)
Estas toxinas provocan el bloqueo de los canales de sodio a nivel celular, lo que se traduce en una parálisis muscular, que puede llevar a la muerte por parálisis respiratoria, compromiso cardiaco y del sistema nervioso central.
Los afectados comienzan a experimentar los síntomas de 4 a 30 minutos luego de la ingesta. Entre ellos se destacan el hormigueo y adormecimiento de labios y lengua, vómitos, parálisis muscular, parálisis respiratoria, asfixia.
Veneno Amnésico de los Mariscos (VAM)
Esta microalga produce una toxina denominada Ácido domóico. Esta puede causar la pérdida temporal o permanente de la memoria (amnesia) en los seres humanos.
Durante las primeras 24 horas los afectados presentarán sintomatología grastrointestinal: vómitos, diarrea y cólicos abdominales. Pasadas las 48 horas de la ingesta, sufrirán confusión, pérdida de memoria y desorientación en los casos más leves. En los peores casos padecerán convulsiones y coma.